SCORE Journal - The Official Publication of SCORE Off-Road Racing
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GANANDO CON PARTES PRESTADAS Wes Miller Gana La Pro UTV General y La Clase FI Con La Ayuda De Otros Equipos Por Mike Vieria Fotos por GetSomePhoto Wes Miller tuvo que superar varios problemas antes y durante la carrera para llevarse la victoria en la Clase Pro UTV FI en la 53ª BFGoodrich Tires SCORE Baja 1000 Presentada por 4 Wheel Parts en su Polaris RZR 2017. Su historial de carreras tiene victorias anteriores en quads en sus más de veinte años compitiendo en la SCORE Baja 1000, pero esta fue su primera victoria en esta carrera conduciendo un UTV. Su intento en septiembre en la SCORE Baja 500 terminó con una biela rompiendo el motor, lo que hizo que la victoria en la SCORE Baja 1000 fuera mucho más dulce. Pero incluso antes de que comenzara la carrera, surgieron problemas para Miller y el equipo Bomb Squad Racing Team. “Dos días antes de la carrera, durante un calentamiento, rompimos un componente para el que no teníamos reemplazo”, dijo Miller. “Justin Lambert, un compañero del equipo RZR pero que también compite contra nosotros, nos dio la pieza que necesitábamos. Eso fue muy generoso y quiero agradecerle por haber hecho eso”. Con el auto arreglado y listo para correr, Miller y su copiloto Donny Powers se dirigieron a la primera etapa de la carrera. Debido a las dificultades que encontró Miller durante la carrera en solitario del año pasado, decidió agregar al piloto Jason Luburgh y al copiloto Jeff Hoskins al equipo. “Conduje desde el principio hasta la milla de carrera 422”, dice Miller. “Jason se subió y condujo el bucle, luego volví en la milla 740 de la carrera para llegar hasta la meta”. Al principio, el Stella Tracker del equipo comenzó a darles problemas, creando confusión sobre dónde terminaba una zona de velocidad de 37 mph. “Nos mantuvimos a la velocidad limitada, pero después de ver cómo los autos de adelante se alejaban de nosotros, finalmente tomé la decisión hundir el acelerador y seguir”, dijo. “Supongo que mucha gente estaba teniendo ese tipo de problemas, pero hicimos algunos pases y comenzamos a abrirnos paso entre el pelotón”. Más adelante en el curso, Miller llegó a otras zonas de velocidad y terminó atrapado detrás de un camión SCORE TT Spec que iba más lento que el límite de velocidad establecido por SCORE. Finalmente, después de pasar por tres zonas de velocidad y ser retenidos, pudieron acelerar el ritmo. Desafortunadamente, esto permitió que otros UTV los alcanzaran. “Me retrasaron más de cincuenta millas”, dice Miller. “Creo que eso permitió que el paquete de UTV se acumulara detrás de mí. Cuando nos detuvimos en el Pit 1 en la milla 152, tres UTV nos pasaron. Todo el mundo estaba muy apretado”. Dos de los UTV que lo habían pasado entraron enseguida en boxes, dejando a Miller tercero en la carretera en su clase. En la milla 230, Miller dijo que pudo pasar a los dos competidores que tenía por delante y tomar el liderazgo físico de su clase. “En este punto, estábamos corriendo bastante alto con muchos camiones y buggies bastante rápidos que estaban teniendo sus propias carreras”, dijo Miller. “Ninguno de ellos quería dejarnos pasar. Hacían una tonelada de polvo y era difícil ver. Pero, pudimos comenzar a trabajar lentamente, eliminándolos y poniéndolos entre nosotros y los otros UTV, que tendrían el mismo problema para intentar pasarlos”. Correr hacia la parte delantera del grupo, sin embargo, no significaba que Miller tenía el camino despejado. “Alrededor de la milla 247, nos dirigíamos directamente hacia la puesta de sol y, en el polvo, chocamos con fuerza contra una gran zanja de lluvia. Pensé que habíamos arrancado todo el lado izquierdo del auto y comprimí tanto la espalda que pensé que me la había roto”. Afortunadamente, tampoco fue el caso. El Polaris siguió funcionando con daños relativamente menores en la suspensión y el dolor de espalda de Miller disminuyó. Miler y su navegador entregaron el auto a sus compañeros de equipo en la milla 422. En ese punto, tenían una ventaja sustancial sobre el siguiente competidor y continuaron con una ventaja de casi 25 minutos sobre el siguiente UTV. Su ventaja se amplió a casi 45 minutos cuando los otros corredores tuvieron que lidiar con sus propios problemas. Con ese margen de tiempo y aún mucha carrera por recorrer, decidieron cambiar la articulación Heim del brazo A superior dañado, así como cambiar un par de neumáticos pinchados que eran el resultado de golpes con unas rocas en la sección anterior. A estas alturas, la espalda de Miller se había tensado nuevamente hasta el punto de que pensó no conducir la última sección del recorrido y que Jason Luburgh terminara la carrera. Pero, dado que conocía mejor el recorrido, Miller sintió que tendrían mejores opciones de terminar la carrera, a pesar de su espalda lastimada. Mientras Miller esperaba el próximo cambio de conductor, llegó la noticia de que el automóvil se detuvo alrededor de la milla 670, luego avanzó unas millas y se detuvo nuevamente. Un perno del brazo A inferior se había desprendido, pero Luburgh y Hoskins pudieron obtener un perno de un equipo de boxes de Trophy Truck, y eso les permitió continuar hacia La Saldana. Allí, pudieron poner el perno adecuado, que le permitió al equipo entrar y correr hasta la meta. “Todo iba bien hasta que sentí que la rueda tiraba con fuerza hacia la izquierda”, dijo Miller. “Donny saltó para echar un vistazo y, efectivamente, otro perno del brazo A se había roto. Afortunadamente, tuvo la previsión de guardarse uno en el bolsillo y pudimos arreglarlo”. Mientras estaban detenidos, fueron adelantados por un Honda de la clase UTV NA y casi fueron alcanzados por el Can-Am X3 de Burroughs que iba segundo en la clase FI. Después de arreglar el brazo A, rápidamente pudieron alcanzar y adelantar al Honda y lograron mantener su ventaja sobre el Can-Am. Después de la última parada de repostaje de los tres, nos dijo: “Empujé todo lo que pude desde allí hasta la meta. Sabía que teníamos la victoria de la clase, pero no estábamos seguros de la victoria general de UTV. Cuando todo estuvo dicho y hecho, ganamos por sólo 58 segundos después de 26 horas de carrera”. “Había muchos terrenos nuevos por ahí, lo cual me pareció increíble. Es divertido hacer rutas diferentes en las que no hayas estado antes, y fue un desafío. Fue un circuito de conducción. Había muchas cosas que si cometías un error te iban a sacar de la carrera”. El equipo Bomb Squad Racing Team planea regresar para la temporada de carreras 2021, y probablemente con el mismo Polaris RZR. Wes felicitó a su competencia por una gran carrera y también enfatizó que ganar es un esfuerzo de equipo, “No es una sola persona la que sale y gana esta carrera. Creo que nuestro equipo hizo un excelente trabajo. Todos van a tener que superar la adversidad de las carreras de Baja, por lo que esto se trata de quien puede superar esa adversidad mejor y el más rápido es el que gana. Pudimos hacer lo suficiente para mantenernos al frente”. SJ