LA VOZ DE VICTORIA DEL CREYENTE

Edición Abril 2021

LA VOZ DE VICTORIA DEL CREYENTE - Revista publicada por los Ministerios Kenneth Copeland, disponible gratuitamente para personas que deseen suscribirse.

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Abraham comenzó a sacrificar a Isaac, «el ángel del Señor lo llamó desde el cielo, y le dijo: «¡Abraham, Abraham!» Y él respondió: «¡Aquí estoy!» Y el ángel dijo: «No extiendas tu mano sobre el niño, ni le hagas nada. Yo sé bien que temes a Dios, pues no me has negado a tu único hijo.» Abraham levantó entonces los ojos, y vio que a sus espaldas había un carnero, trabado por los cuernos en un zarzal. Y Abraham fue y tomó el carnero, y lo ofreció en holocausto en lugar de su hijo.» Después de sacrificar el carnero, el ángel del SEÑOR volvió a llamar a Abraham. Esta vez, para declarar el juramento de seguridad que encontramos en Hebreos 6:14. «Yo, el Señor, he jurado por mí mismo que, por esto que has hecho, de no negarme a tu único hijo, ciertamente te bendeciré; multiplicaré tu descendencia como las estrellas del cielo y como la arena que hay a la orilla del mar; ¡tu descendencia conquistará las ciudades de sus enemigos! En tu simiente serán bendecidas todas las naciones de la tierra, por cuanto atendiste a mi voz.» (versículos 16-18, énfasis del autor). ¿Qué quiso decir Dios cuando dijo: "he jurado por Mí mismo"? Significa: "No hay nadie más grande que Yo por quien jurar. Entonces, juro por Mi propia vida que mantendré este pacto de BENDICIÓN que hice contigo. Si no cumplo ni una palabra, ni siquiera una promesa de este pacto, me destruiré a Mí mismo." ¡Ese es un juramento solemne! Imagina la escena. Dios está haciendo este compromiso sobre la sangre del carnero que fue el sustituto del único hijo de Su colaborador del pacto. No hay forma de que Él se pueda desvincular de él. Cualquier discusión al respecto se acabó en ese instante. Se ha resuelto para siempre. Dios no puede romper esta promesa y seguir viviendo. Debido a que Abraham entendió este principio, ¡su fe en la PALABRA de Dios fue inquebrantable! Así que: «plenamente convencido de que Dios era también poderoso para hacer todo lo que había prometido … Abraham esperó con paciencia, y recibió lo que Dios le había prometido.» (Romanos 4:21; Hebreos 6:15). Ese juramento te pertenece "Pero hermano Copeland, Dios le hizo ese juramento a Abraham en el Antiguo Testamento. Realmente no tiene nada que ver con nosotros, como creyentes del Nuevo Testamento." ¡Sí tiene que ver! Dios nos tenía en mente cuando hizo ese juramento. Su deseo de asegurar nuestra redención fue la motivación detrás del mismo. Dios sabía que, si Abraham probaba que estaba dispuesto a sacrificar a su único hijo, entonces Él estaría obligado a hacer lo mismo. Debido a Su pacto respaldado por la sangre y al juramento que hizo, estaría obligado a enviar a Jesús a la cruz para salvar a Abraham y su descendencia. ¿Quién es la simiente (o descendencia) de Abraham? ¡Nosotros! Gálatas 3:29 dice: «Y si ustedes son de Cristo, ciertamente son linaje de Abraham y, según la promesa, herederos.» Esto significa que el juramento que Dios le hizo a Abraham también nos lo hizo a nosotros. Significa que podemos estar tan seguros como él de que Dios hará que todas Sus preciosas y grandísimas promesas se hagan realidad en nuestras vidas. Cuando alguien jura, lo hace por alguien superior a sí mismo. De esa manera confirma lo que ha dicho y pone fin a toda discusión. Por eso Dios, queriendo demostrar claramente a los herederos de la promesa que sus propósitos no cambian, les hizo un juramento, para que por CONSEJOS PRÁCTICOS: 1 La posición de fe de Abraham fue inquebrantable porque sabía cuán serio era Dios acerca de Su PALABRA. (Hebreos 6:13-14) 2 La promesa respaldada por el juramento de Dios le permitió a Abraham perseverar pacientemente en la fe, a pesar de circunstancias contrarias. (Hebreos 6:15) 3 Como creyente, eres heredero de esa promesa respaldada por un juramento. (Gálatas 3:29) 4 Dios te ha prometido y jurado con la sangre de Jesús que cumplirá por ti cada palabra del Nuevo Pacto. (Hebreos 6:17-18) 5 Concentrarse en cuán serio es Dios acerca de guardar Su PALABRA te ayudará a mantenerte firme en la fe y a mantener al diablo bajo tus pies. (Hebreos 6:19) 8 : LV V C C

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