LA VOZ DE VICTORIA DEL CREYENTE

Edición Junio 2021

LA VOZ DE VICTORIA DEL CREYENTE - Revista publicada por los Ministerios Kenneth Copeland, disponible gratuitamente para personas que deseen suscribirse.

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por Kenneth Copeland ¡ADQUIERE SABIDURÍA! No se toman tiempo para controlar su espíritu a la espera de la directiva del SEÑOR, ni para escucharlo. Simplemente, reaccionan. Si están enfermos, comienzan a decir: "Oh, Dios, ¡necesito sanidad! ¡Declaro que he sido sanado según 1 Pedro 2:24!" Si se enfrentan a un problema nanciero, inmediatamente comienzan a pedir dinero. Dicen: "¡Oh, Dios, necesito $1.000 dólares! ¡Creo que los recibo!" Oraciones y declaraciones instintivas por el estilo suenan bien. A veces, funcionan. Pero, con demasiada frecuencia, no lo hacen. Puedes equipararlo a disparar una escopeta: hace bastante ruido, pero usualmente no da en el blanco. Como resultado, nada cambia. La situación negativa se mantiene. La enfermedad persiste de manera obstinada. El problema nanciero persiste. ¿Por qué? No es porque, tal como los críticos declaran, "la oración de fe no siempre funciona para todos." ¡Sí lo hace! Jesús lo dejó establecido en Marcos 11:22-23. Después de ordenar- nos: «Tengan fe en Dios», dijo: «Porque de cierto les digo que cualquiera que diga a este monte: "¡Quítate de ahí y échate en el mar!", su orden se cumplirá, siempre y cuando no dude en su cora- zón, sino que crea que se cumplirá.» Presta atención: Jesús no dijo que la fe funcionaría para algunas personas. Dijo que f uncionará para cualquiera; esa es una ley espiritual. Al igual que la ley de la gravedad en el ámbito natural, está en funcionamiento todo el tiempo y para todos, sin distinción. Eso signi ca que cualquiera que tenga fe en Dios (o el tipo de fe de Dios) y opere en ella como lo hizo Jesús, podrá obtener los mismos resultados. Signi ca que nuestras palabras de fe pueden tener el mismo efecto sobre cualquier situación injusta en nuestra vida, tal como las palabras de Jesús tuvieron en la higuera y que todos sus discípulos presenciaron mientras les enseñaba la ley de la fe. Probablemente recuerdas haber leído sobre esa higuera. El día anterior, Jesús LOS CREYENTES CUANDO ESTÁN APRENDIENDO A VIVIR POR FE: EN EL INSTANTE QUE SE ENFRENTAN A ALGUNA SITUACIÓN NEGATIVA, O A ALGUNA MONTAÑA DE PROBLEMAS QUE NECESITA SER REMOVIDA, INMEDIATAMENTE COMIENZAN A ORAR, A CITAR ESCRITURAS Y HACER DECLARACIONES DE FE. EXISTE UN ERROR BASTANTE COMÚN QUE COMETEN 1 La fe es una ley espiritual; si la usamos como lo hizo Jesús, funcionará para nosotros tal como funcionó para él. (Marcos 11:23) 2 Jesús no solo oró o dijo cualquier cosa que le vino a la mente. Siempre se aseguró de haber escuchado primero del Padre. (Juan 14:10) 3 Cuando Jesús fue al templo por primera vez en Marcos 11, no dijo ni hizo nada; pero después de orar y recibir la sabiduría de Dios, fue una historia diferente. (Marcos 11:15, 17) 4 Como creyente nacido de nuevo, la sabiduría de Dios te pertenece. (1 Corintios 1:30) 5 Antes de que intentes usar tu fe para mover la montaña, úsala primero para recibir sabiduría. (Santiago 1:5-6) CONSEJOS PRÁCTICOS: LV V C : 5 C

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