LA VOZ DE VICTORIA DEL CREYENTE - Revista publicada por los Ministerios Kenneth Copeland, disponible gratuitamente para personas que deseen suscribirse.
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todas tienen una cosa en común: revelan una manifestación de Su amor (1 Corintios 13:8). Considera a los que nacen de nuevo. ¿Cómo pasan de sus asientos al altar? El amor los atrae. Como creyentes, podemos predicar y enseñar el amor, y deberíamos hacerlo, pero en algún momento el amor debe dejar de ser solamente un tema predicado y convertirse en la atmósfera del auditorio. Debe convertirse en el aire que respiramos. Si va mos a pastorea r y ser pa r te de una iglesia infa lible, entonces debemos reconocer rápidamente que la atmósfera es importante. Predicar el amor de Dios es de vital importancia, pero en algún momento el mensaje debe desbordarse en una manifestación tangible del amor de Dios por nosotros, nuestro amor por Él y por los demás. Camina en amor Efesios 5:1-2 dice: «Por tanto, sean imitadores de Dios como hijos amados,y anden en amor, como Cristo también nos amó y se entregó a sí mismo por nosotros como ofrenda y sacri cio en olor fragante a Dios.» (Reina Valera Actualizada 2015). ¿No es una imagen hermosa? El amor de Jesús por nosotros, manifestado en su sacri cio por nosotros, llenó la atmósfera del cielo y se convirtió en una fragancia grati cante para Dios. Efesios continúa: «Pero la inmoralidad sexual y toda impureza o avaricia no se nombren más entre ustedes, como corresponde a los santos.» (versículo 3). ¡Guau! ¡Subió de tono rápidamente! Inmediatamente después de una hermosa descripción de caminar en amor, el Espíritu de Dios a través de Pablo comenzó a hablar sobre la seriedad de la fornicación y la codicia: los pecados, dijo, que no tienen lugar en la casa de Dios y ni siquiera deberían ser nombrados entre nosotros. ¿Por qué? Porque en su raíz, son simplemente un fracaso para caminar en el amor. Lamentablemente, todos hemos v isto ministros y ministerios, tanto grandes como pequeños, fracasar en el área de la pureza sexual y la integridad financiera. Pero en el fondo, estos fracasos son más que sexo y dinero. Son un fracaso en el caminar en el amor de Dios. Jesús nos dijo en Mateo 6:24 que no podemos Así como toda cosa que Dios le haya pedido hacer a cualquiera, comenzar una iglesia requiere de fe. ¿Y cómo llega la fe? Viene al escuchar la Palabra. Entonces, sin una palabra clara de Dios que dirija a alguien a comenzar una nueva obra, ¿cómo tener fe o con anza en que la iglesia tendrá éxito? Estoy convencido de que muchas iglesias fracasan porque, si no tenían una palabra de Dios, nunca deberían haber abierto en primer lugar. En ot r a s p a l a br a s , D io s no e s t a b a involucrado en ese proyecto. En sus cartas a las iglesias en el Nuevo Testamento, Pablo a menudo los saludaba diciendo: «Yo, Pablo, apóstol de Jesucristo por la voluntad de Dios…» Cada vez que escribía esas palabras, Pablo decía: "No me llamé a mí mismo ni me auto ungí para hacer esta tarea. El Señor lo hizo. Es Su voluntad." Pablo conf iaba en lo que Dios le había llamado a hacer. Al igual que el supremo llamado de Pablo, la base de nuestras iglesias debe ser una palabra del Señor, un capítulo y un versículo, el testimonio del Espíritu e incluso una palabra a rmativa de nuestros ancianos. Sin ellos, no hay base para el éxito. Midiendo el éxito verdadero Una vez a rmados en esa base, ¿cómo saber si está funcionando? ¿Determinamos si una iglesia es exitosa por la cantidad de servicios que realiza? ¿O por cuántos campus tiene repartidos por la ciudad? ¿Cuántas personas llegan a sentarse? ¿Cuánto dinero hay en el banco? S i b i e n t o d a s e s a s c o s a s p u e d e n proporcionarnos una imagen de éxito a nivel super cial, ninguna de ellas es un verdadero indicador del bienestar de una iglesia. En cambio, debemos preguntarnos: "¿Cómo mide Dios el éxito?" Cuando Dios mira a una iglesia, lo hace con estas preguntas en mente: ¿Las personas nacen de nuevo o se sanan? ¿Se están tocando y cambiando vidas? ¿Se están renovando las mentes? ¿Se están restaurando los matrimonios? Las respuestas a esas preguntas son la vara que Dios usa para medir el éxito porque Jeremy Pearsons y su esposa, Sarah, son fundadores de los Ministerios Internacionales Pearsons y pastores de la Iglesia Legacy en Green Mountain Falls, Colorado. Para obtener más información, visítalos en línea en pearsonsministries.com o legacychurch.family. i Mira a Jeremy y Sarah en Domingo 7:30 a.m. | Miércoles 10:30 p.m. Thu. 7:30 a.m. | 3:30 p.m. | 10 p.m. CT Mira a C H A N N E L Domingo 7:30 a.m. | Miércoles 10:30 C H A N N E L Legacy Television "Amar al dinero es lo que yo identifi co como 'UNA AVENTURA O INFIDELIDAD FINANCIERA,' porque es primordial para engañar a Dios." 1 0 : LV V C