LA VOZ DE VICTORIA DEL CREYENTE

Edición Julio LATAM 2021

LA VOZ DE VICTORIA DEL CREYENTE - Revista publicada por los Ministerios Kenneth Copeland, disponible gratuitamente para personas que deseen suscribirse.

Issue link: http://read.uberflip.com/i/1406015

Contents of this Issue

Navigation

Page 10 of 15

LV V C : 1 1 meningitis espinal", dice Larry. "Pero gracias a Dios, habíamos aprendido de Kenneth que la sanación nos per tenecía. Dec la ramos la Palabra de Dios sobre ella sin parar mientras las enfermeras la inyectaban y le daban baños de hielo. Confesábamos: '¡Tara ha sido sanada por las heridas de Jesús! ¡Ningún arma que se forme contra ella prosperará!'" Continuamos declarado la Palabra sobre ella." "Damos gloria a Dios por sanar a Tara. También le damos gracias a Dios porque, debido a que Kenneth nos enseñó nuestros derechos y nuestra autoridad, nuestra hija fue sanada y hecha plena." Viviendo en gratificación retrasada Durante los siguientes años, las cosas empezaron a mejorar. La familia creció cuando Pam dio a luz a dos hijos, Stephen y Ricky. En 1986, su negocio de Venta Directa comenzó a dar señales de vida y su negocio de mantención de césped también estaba creciendo. En diciembre de 1988 habian pagado todas sus cuentas y recibieron un bono de $5.000 dólares. Larry le dio a Pam $400 y se quedó con $400 para él. "Ha pasado demasiado tiempo desde que compramos algo para nosotros mismos. Ve al centro comercial y cómprate algo lindo." Pam caminó por el centro comercial, mirando las vidrieras. Recorrió de un lado a otro los pasillos. Miró carteras y joyas. Todo le parecía tan extraño. "¿Que compraste?" le preguntó Larry cuando llegó a casa. "¡Me divertí mucho!" contestó Pam, y sus ojos se iluminaron. No cargaba bolsas; no había comprado nada. Había vivido en gratif icación retrasada durante tanto tiempo que no sabía cómo gastar el dinero. "Vuelve al centro comercial", le ordenó Larry. "¡Cómprate algo!" En 1989, Larry tuvo la oportunidad de vender su negocio de mantención de césped. Eso solo les dejó una fuente de ingresos: su negocio de venta directa. Pero estaba prosperando. "Vivimos en esa casita de alquiler durante siete años", explica Larry. "Nos mudamos a otro alquiler, que era un poco más grande, y nos quedamos allí dos años. Queríamos comprar una casa, pero un agente de bienes raíces examinó nuestras finanzas y nos dijo que nunca obtendríamos un préstamo." "En 1985, nuestros ingresos eran de solo $10.000. Subía un poco cada año, y finalmente nos pusimos al día con todas nuestras facturas. Para 1991, el negocio estaba en auge: ¡ganábamos $380.000! Estábamos tan abrumados por la bendición que no sabíamos qué hacer." "Ese mismo año ahorramos $100.000 y lo usamos como pago inicial para una casa de $350.000. ¡Nos aprobaron el préstamo en 15 minutos! Pagamos ese préstamo muy rápidamente." "Kenneth nos enseñó a vivir dentro de nuestras posibilidades. Nos enseñó a dar y sembrar. Nuestros ingresos han seguido creciendo. Hoy, somos dueños de una granja de 17 hectáreas en Carolina del Norte. El letrero en las puertas que conducen a la granja dice: 'Deléitate en el Señor y Él te concederá los deseos de tu corazón.'" "Recientemente compramos una segunda casa en Florida en un terreno de más de 2 hectáreas. Nunca hemos invertido en el sistema del mundo. Cuando la gente me pide consejo financiero, les digo que vivimos para dar, especialmente a los Ministerios Kenneth Copeland. La mayoría de las veces, las personas que luchan con las finanzas no entienden que el diezmo es simplemente devolverle a Dios lo que ya es Suyo. La multiplicación proviene de lo que das por encima de eso." "Tienes que confiar en Dios. Muchas veces la gente no da y por lo tanto no puede cosechar. La gente solía decirme que era estúpido por no hacer casi nada y seguir dándole a Dios. No me llaman estúpido ahora." "No somos especiales. Solo somos personas humildes y agradecidas que lavaban autos y que aprendieron a operar con el poder y los principios de la siembra y la cosecha. Simplemente no puedes superar a Dios. Lo hemos intentado." "Le damos a nuestro Padre celestial todo el honor y la gloria por nuestra prosperidad. Por nuestro maravilloso matrimonio, nuestros tres hijos y pronto, seis nietos. Vivimos una vida bendecida gracias a nuestra colaboración con Kenneth Copeland. Esa colaboración lo signif ica todo para nosotros. Ha cambiado toda la trayectoria de nuestras vidas." Larry y Pam Winters no se limitan a sembrar dinero. También siembran en la vida de las personas. En 1991, comenzaron a organizar sus propias conferencias de negocios cuatro veces al año. Cada domingo, durante la conferencia, comparten el verdadero secreto del éxito: vivir para Jesús. Le han dado la bienvenida a miles y miles de personas al reino de Dios. V "NO SOMOS ESPECIALES. SOLO SOMOS PERSONAS HUMILDES Y AGRADECIDAS QUE LAVABAN AUTOS Y QUE APRENDIERON A OPERAR CON EL PODER Y LOS PRINCIPIOS DE LA SIEMBRA Y LA COSECHA."

Articles in this issue

Archives of this issue

view archives of LA VOZ DE VICTORIA DEL CREYENTE - Edición Julio LATAM 2021