LA VOZ DE VICTORIA DEL CREYENTE - Revista publicada por los Ministerios Kenneth Copeland, disponible gratuitamente para personas que deseen suscribirse.
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LV V C : 7 Si no está s dispuesto a hacerlo, tendrá s problemas. Tendrás dificultades para recibir t u sa n ida d, la l ibera ción o cua lqu ier ot ra cosa que necesites. Por lo tanto, permanece siempre dispuesto y sé rápido para perdonar. No tienes que sentir te bien pa ra hacerlo. Puedes simplemente obedecer. Puede deja r de queja r te de todos los a g rav ios que ha s recibido, prepa ra r te como un soldado a nte tu Coma nda nte y decir: "¡Señor, perdono a f u l a n o d e t a l ! " E s t á n p e r don a do s . P i do per m i so pa ra recibi r m i sa na ción , Señor. Much ísi ma s g ra cia s. ¡Estoy sa no g lor ia a Dios!" Come las cosas del listado bueno Así como perdonar es clave para vivir una vida la rga y for ta lecida, ta mbién lo es todo aquel lo que la PA L A BR A de Dios nos dice que hagamos. Su libro es el mejor manual de salud y longevidad que haya sido escrito. En Levítico, por ejemplo, leemos listados de alimentos que se categorizan en buenos y malos para el consumo. Estos listados están diseñados pa ra promover una v ida úti l de 120 a ños. Seg ú n la ley del A ntig uo Pacto, comer conforme esos listados era una de las maneras en que los israelitas se mantenían justificados ante Dios. B ajo el Nue vo Pa c t o, p or s upue s t o, no estamos obligados por las leyes alimenticias relig iosa s ya que somos justif icados por la sa ngre de Jesús. Sin embargo, eso no niega las pautas dietéticas de Dios. ¡Estas todavía siguen siendo Su sabiduría! Sin embargo, muchos creyentes la ignoran. Comen lo que sea que su ca r ne les dicte y piensan que está bien porque 1 Timoteo 4:4 dice: «Porque todo lo que Dios creó es bueno, y nada es desechable, si se toma con acción de gracias». No se dan cuenta de que, según el versículo anterior, esa declaración se refiere únicamente a las carnes «que Dios creó, para que los creyentes… pa r ticipa ra n de el los.» (versículo 3). ¡ D i o s n o c r e ó t o d a s l a s c a r n e s p a r a comerlas! Levítico lo deja cla ro: Él no creó serpientes pa ra el consumo huma no. Él no creó ca i ma nes, murciéla gos, ca ma rones y bagres para que los comiéramos. "¡Oh, herma no Copela nd, no me deje sin comer bagre!" N o t e v o y a q u i t a r n a d a . N o e s t o y pred ica ndo la ley. Estoy pred ica ndo la fe. Solo estoy compa r tiendo con ustedes que, en cuanto a mí, he decidido usar mi fe para comer la comida incluida en el listado bueno de Dios y mantenerme alejado del malo. ¿Por qué? Porque estoy creyendo por vivir y servir a Dios durante 120 años, y lo haré sin cáncer, problemas cardíacos o cualquier otro tipo de enfermedad. Debes tomar tu propia decisión al respecto. C om e lo q ue t ú y Je s ú s a c uer den . Per o recuerda esto: lo que elijas comer, junto a las demás elecciones de estilo de vida que hagas, afectarán tus años de vida. Incluso los médicos está n de acuerdo en esto. Dicen que el 98% o má s de toda s la s enfermedades crónica s son autoinducida s. Los expertos médicos también han concluido que, c omo d ic e l a PA L A BR A de D ios , se supone que el cuerpo humano viva 120 años. Si mplement e no ha n descubier t o t odav ía cómo lograr que lo haga en la práctica. Per o D io s lo s a b e . E nt onc e s , l a mejor ma nera de vivir Su vida plena es seg uir Su prog r a m a . D e sc ubre lo que É l d ic e en l a Biblia, créelo y actúa en consecuencia. " Pero no estoy muy fa mi lia rizado con la Biblia", podrías decir. No tienes que estarlo. Solo confía en que el Gran Yo Soy que está dentro de ti lo ha escrito y búsca lo pa ra que te ay ude. Di: "SEÑOR , muéstrame en Tu PALABR A lo que necesito v e r y e n s é ñ a m e lo q u e n e c e s it o s a b e r." Entonces empieza a leer y no te detengas. Te s or pr en der á s de lo q ue s uc e de . Te enc ont r a r á s sa lt a ndo de u n a pá g i n a a l a otra. Abrirás en un capítulo y pensarás, ¡Oh! ¡Eso aplica a la situación con la que he estado lidiando! Luego, pa sa rá s a otro pa saje y el Espíritu Santo te hablará a través de ese. Por ejemplo, es posible que te encuentres leyendo en el Sa lmo 127:2, acerca de cómo: «el Señor da el sueño a los que él a ma », y el Espí r it u Sa nto pod r ía deci r te: Te está s q u ed an d o d e s p i e r to h a sta muy tard e po r l a n o c h e . Ne c e s it a s i r t e a l a c a m a m á s t empra no y desca n sa r m á s . O puede leer en Proverbios 17:22: «Un cora zón a leg re es la mejor medicina » y escucha r a l Espíritu Santo decirte que te rías más. E s a s p u e d e n p a r e c e r i n s t r u c c i o n e s s enci l l a s , p er o pue den m a r c a r u n a g r a n d i ferenci a en t u sa lud . L a fa lt a de sueño a fe c t a t u si s t em a i n mu nológ ic o. L a r i s a te for ta lece. La ciencia médica incluso ha demostrado que reír alivia el dolor y cura las enfermedades. No es casua lidad que Filipenses 4:4 diga: «Regocíjense en el Señor siempre. Y otra vez les digo, ¡regocíjense!» ¡El gozo del SEÑOR es t u for ta leza! Se necesita n f uerza s pa ra vivir 110 o 120 años. Se necesita fuerza para terminar tu carrera aquí en la tierra y hacer todo lo que Dios te ha llamado a hacer. ¡ A sí que regocíjate, desca nsa y come de la list a buena! ¡R ecla ma la s promesa s del Sa lmo 91, rehúsate a deja r que el diablo te c onven z a y v ive u n a v id a l a r ga , f uer t e y satisfactoria!