LA VOZ DE VICTORIA DEL CREYENTE

Edición Diciembre LATAM 2021

LA VOZ DE VICTORIA DEL CREYENTE - Revista publicada por los Ministerios Kenneth Copeland, disponible gratuitamente para personas que deseen suscribirse.

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por Gloria Copeland Una y otra vez encontramos en las Escrituras: "Escuchen mi palabra y obedézcanla... y serán bendecidos." Por ejemplo, piensa en Adá n y Eva en el Ja rdín del Edén. Dios los bendijo y luego les dio un ma ndato: «Puedes comer de todo á rbol del huer to, pero no debes comer del árbol del conocimiento del bien y del mal, porque el día que comas de él ciertamente morirás.» (Génesis 2:16- 17). Dios no se los dijo para privarlos de a lgo bueno y esclavizarlos. Todo lo contrario. Lo dijo para que pudieran seguir siendo libres y continuar disfrutando de todo lo que Él les había proporcionado en el Edén. Adán y Eva tenían una vida absolutamente maravillosa. Bendecidos sin medida, tenían un lugar perfecto para vivir, con abundancia de todo lo bueno. Todas sus necesidades estaban satisfechas. Tenían paz, estaban revestidos de la gloria de Dios, caminaban en comunión ininterrumpida con Él, y tenían dominio sobre toda la tierra. La voluntad de Dios para ellos era vivir de esa manera para siempre. Lo habrían logrado si hubieran escuchado y obedecido lo que Dios les dijo. Pero no lo hicieron. Decidieron hacer las cosas a su manera y comer del fruto prohibido. ¿Qué sucedió? Exacta mente lo que Dios dijo que pasa ría . Murieron espi r it ua l mente, y f i na l mente t a mbién mu r ieron f ísica mente como resultado del pecado. Fue una gran tragedia, y no era lo que Dios quería para ellos. Pero Él les había dado libre albedrío y les permitió ejercerlo. No intervino cuando vio que estaban a punto de desobedecerle. No vino a quitarles el fruto de la mano y decirles: "¿Recuerdan Mis instrucciones?" Por el contrario, les dejó tomar su decisión y, cuando lo hicieron, cumplió Su Palabra. Esa es la forma en que Dios siempre ha operado con Su pueblo. Lo hace por medio de promesas. Te dice lo que sucederá si le obedeces, y lo que sucederá si no lo haces. Luego, te deja elegir. Dios nunca te obligará a obedecerle. Él no hará un esclavo de nadie. Él no quiere esclavos. Él quiere una familia. Así que simplemente nos presenta la s opciones en Su Pa labra , nos deja decidi r lo que quera mos hacer, y experimentamos los resultados correspondientes, para bien o para mal. En Deuteronomio 28:1-2 (LBLA), Dios les ex plicó esta verdad a los isra el it a s con g ra n cla r ida d . L es d ijo: «Y sucederá que si obedeces d i l i gent ement e a l S eñor t u D io s , c u id a ndo de c u mpl i r t o do s s u s mandamientos que yo te mando hoy, el Señor tu Dios te pondrá en a lto sobre todas las naciones de la tierra. Y todas estas bendiciones vendrán sobre ti y te alcanzarán, si obedeces al Señor tu Dios». Nota que Dios no les dijo a los israelitas que sólo escucharan e hicieran lo que Él decía de vez en cua ndo, o cua ndo se les a ntoja ra . Él les dijo LV V C : 1 3

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