LA VOZ DE VICTORIA DEL CREYENTE

Edición Enero LATAM 2022

LA VOZ DE VICTORIA DEL CREYENTE - Revista publicada por los Ministerios Kenneth Copeland, disponible gratuitamente para personas que deseen suscribirse.

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ni con los autos. ¡No, no lo haré! juró. ¡Voy a jugar al béisbol profesional! Jer r y no le d ijo a n a d ie lo que h a bí a escuchado con tanta claridad ese día. El domingo sig uiente, en su iglesia de la localidad de Shreveport, Jerry Savelle recorrió el pasillo centra l y decla ró pública mente a Jesús como su Salvador. Se unió a la iglesia y fue bautizado. Jerry le dio su corazón a Jesús, pero se negó a darle su vida. Nunca, nunca le daría su vida. " Ese f ue un a ño muy a g itado en mi vida", recuerda Jerry. "Mi familia se mudó a la calle Millard, a un ambiente más campestre, donde criaba gallinas, vendía huevos y tenía un caballo." La pequeña Carolyn Creech, de 10 años, vivía en la misma calle. "El primer día que me vio pasar en bicicleta por delante de su casa le dijo a su madre: 'Acabo de ver al chico con el que me voy a casar.'" "Yo desconocía la declaración de Carolyn, y nos hicimos buenas amigos. Cuando llegamos al bachillerato, yo la llevaba a clase todas las mañanas. Ella se sentaba en el asiento trasero y mi novia en el delantero." Poco tiempo después, Jerry descubrió que era imposible servir a Dios y huir de su llamado a l mismo tiempo. Incluso en la universidad estuvo huyéndole. Vivía en un apartamento f uer a del c a mpu s y s e mez cl a ba c on u n grupo de jóvenes que se dedicaban a jugar a las cartas, el juego de azar y la cerveza. Era lo peor de ambos mundos. Debido a que había entregado su corazón al Señor, pero se negaba a reconocer el llamado de Dios en su vida, la iglesia y cualquier forma de vida espiritual le produjeron convicción. Jerry no podía encontrar la paz. Ya no era el joven soñador ni confiado que había sido antes, así que abandonó la idea de jugar al béisbol. Se dedicó al plan B. Su pasión por restaurar automóviles pasó a ocupar el primer lugar en su vida. Dios seguía fuera de juego. " E s t u d i é e d u c a c i ó n f í s i c a e n e l Northwestern State College de Natchitoches", recuerda Jerry. "Durante mi segundo año de universidad, volví a casa para pasar el fin de semana y me encontré de nuevo con Carolyn. Esta vez la miré bien y la invité a salir. Ocho meses después nos casamos." La noche anterior a la boda, Carolyn hizo trizas la nueva sensación de pa z que Jerr y había encontrado. "Cua ndo tenía 8 a ños", le dijo, "tuve una poderosa experiencia con Dios. Fui bautizada en el Espíritu Santo. Le prometí que el hombre con el que me casaría nacería de nuevo, estaría lleno del Espíritu, predicaría el evangelio e iría a África." Jerry no había aceptado la llamada de Dios a su vida. Ciertamente no iba a aceptar la de Carolyn. " Entonces te está s ca sa ndo con el hombre equivocado." " Después de la boda , f ui a la un iversidad por la noche y trabajé en un taller de pintura y ca rrocería dura nte el día", explica Jerr y. "En 1968, me llamaron al servicio activo en el ejército. Nuestra hija Jerriann nació mientras yo estaba sirviendo." "Después de mi tiempo de servicio activo, me uní a las reservas. De vuelta en casa, abrí el Taller de Pintura y Reparaciones Jerry. Era un sueño hecho rea lidad. Luego, en 1969, nació nuestra segunda hija, Terri." Dios lanza Su bola curva La vida no puede ser nada mejor, pensaba Jerry de cuando en cuando mientras se despedía de su familia con un beso antes de salir a trabajar cada mañana. Esa frágil paz podría haber durado un tiempo si no hubiese sido por una cosa: Dios le lanzó a Jerry Savelle Su bola curva. Su nombre era Kenneth Copeland. En febrero de 1969, Kenneth Copeland llegó a Shreveport para predicar en la iglesia de Carolyn. Se hospedaba en la casa de los padres de ella. Casualmente vivían al lado de Jerry y Carolyn. Carolyn estaba decidida a que Jerry asistiera a las reuniones. Jerry estaba decidido a no ir. Ella le rogó y suplicó, día tras día, pero él se negó rotundamente. " Si no va s a la reu n ión", le d ijo Ca roly n levantando las manos en seña l de derrota, "a l menos camina hasta la puerta de al lado y saluda al hombre." De mala gana, Jerry aceptó. Jerry habló con Gloria Copeland cuando los presentaron, y luego esperó impaciente a que apa reciera Kenneth. Estaba a punto de irse cuando el hombre salió de la habitación. "Hermano Copeland", dijo el suegro de Jerry, "me gustaría que conocieras a mi yerno, Jerry Savelle." Kenneth hizo un gesto con la mano y se dirigió a la cocina. ¡Listo! pensó Jerry, ya puedo irme. Casi había llegado a la puerta cuando Kenneth lo llamó: "¡Espera un momento!" Señaló con un dedo a Jerry y continuó: "Dios te va a prosperar." Luego, desapareció. ¡Carolyn ha estado hablando con él de mis asuntos! se enojó Jerry en silencio. ¿Cómo podía saber que iba a prosperar si no era así? Todas las noches, Carolyn le rogaba a Jerry que asistiera a la reunión del hermano Copeland. Para la última noche, él habría hecho cualquier cosa con tal de que ella dejara de hablar del asunto. Antiquo Testamento Nuevo Testamento ENERO LEAMOS LA BIBLIA Sab 1 Gen. 1:1-3:7 Dom 2 Sal. 1-5; Pro. 1:1-19 Lun 3 Gen. 3:8-5:20 Mat. 1 Mar 4 Gen. 5:21-8:5 Mat. 2 Mie 5 Gen. 8:6-10:19 Mat. 3 Jue 6 Gen. 10:20-12:20 Mat. 4 Vie 7 Gen. 13-15 Mat. 5 Sab 8 Gen. 16:1-18:21 Dom 9 Sal. 6-9; Pro. 1:20-33 Lun 10 Gen. 18:22-20:13 Mat. 6 Mar 11 Gen. 20:14-22:24 Mat. 7 Mie 12 Gen. 23:1-24:49 Mat. 8 Jue 13 Gen. 24:50-26:11 Mat. 9 Vie 14 Gen. 26:12-27:40 Mat. 10 Sab 15 Gen. 27: 41-29:35 Dom 16 Sal. 10-13; Pro. 2 Lun 17 Gen. 30:1-31:21 Mat. 11 Mar 18 Gen. 31:22-32:32 Mat. 12 Mie 19 Gen. 33:1-35:8 Mat. 13 Jue 20 Gen. 35:9-36:43 Mat. 14 Vie 21 Gen. 37-38 Mat. 15 Sab 22 Gen. 39:1-41:13 Dom 23 Sal. 14-17; Pro. 3:1-18 Lun 24 Gen. 41:14-42:24 Mat. 16 Mar 25 Gen. 42:25-44:17 Mat. 17 Mie 26 Gen. 44:18-48:16 Mat. 18 Jue 27 Gen. 48:17-50:26 Mat. 19 Vie 28 Éx. 1:1-3:12 Mat. 20 Sab 29 Éx. 3:13-5:21 Dom 30 Sal. 18; Pro. 3:19-35 Lun 31 Éx. 5:22-7:25 Mat. 21

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