LA VOZ DE VICTORIA DEL CREYENTE

Edición Agosto LATAM 2022

LA VOZ DE VICTORIA DEL CREYENTE - Revista publicada por los Ministerios Kenneth Copeland, disponible gratuitamente para personas que deseen suscribirse.

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LV V C : 7 El trauma vuelve al ataque "Había desa rrollado un trastorno de estrés postraumático (TEPT) por mis experiencias en el hospital. Por la noche, golpeaba las lámparas mientras dormía. Mis golpes me hacían caer de la cama en numerosas ocasiones." " Ent onc e s , el 3 de d iciembre, l a pastora Terri le sugirió a Va lerie que fuéramos a ver a un médico que trata a los pa cient es con pla sma r ico en plaquetas. A los pocos días de tomar el plasma rico en plaquetas, todos los síntomas del TEPT desaparecieron. Eso también detuvo la pérdida de cabello de Valerie relacionada con el COVID." A l acercarse el año nuevo, Va lerie sintió que ella y Dan debían asistir al ser vicio de A ño Nuevo en la Iglesia I n t e r n a c i o n a l E M I C , d o n d e e l Hermano Copeland predicaría. "A lgo que no había cesado era mi tos constante", recordó Dan. "Entre eso, arrastrar mi tanque de oxígeno y el cansancio, no pensé que tendría la resistencia para asistir." D e t odos modos , Da n y Va ler ie asistieron a l servicio de Año Nuevo. Después del servicio, Dan fue llevado a la sala de los ujieres. "Lo siguiente que recuerdo es que la pastora Terri y el hermano Copeland entraron en la sala. Cuando lo vi, me puse inmediata mente de pie por el gran respeto que sentía, pero me dijo que me sentara. Entonces, el hermano Copeland abrió su Biblia en Santiago 5:14 y leyó: «¿Hay entre ustedes algún enfermo? Que se llame a los ancianos de la iglesia, pa ra que oren por él y lo unjan con aceite en el nombre del Señor.»" " D e s p ué s de le erlo , e l her m a no Copela nd me pidió que lo leyera . Lo hice y luego me preg untó si lo creía. Por supues t o que lo creía . A sí que derramó aceite sobre mi cabeza y oró por mi sanidad. Luego, el pastor George oró por mí. Aunque todavía no había v isto la ma nifestación, supe en ese momento que mis pulmones estaba n completamente curados. Estaba hecho." E l p o d e r d e u n a m o l é c u l a hepática Antes de eso, Dan le había pedido a la pastora Terri que hablara con el Dr. Don Colbert para ver si creía que necesitaba n inyecciones de célula s había un 1% de posibilidades de que sobreviviera. Mientras tanto, David se convenció de que tenía que sacar a su padre del hospital. Pero nadie aceptaba a un paciente con respirador. Un mundo completamente nuevo Tras una exhaustiva investigación, David encontró un centro de cuidados de larga duración que aceptó a Dan en esa condición. Lo trasladaron al centro en su 40º día de estancia en el hospital. El persona l le retiró el respirador. Luego, le quitaron los medicamentos. Da n a br ió los ojos y m i ró a s u alrededor. "¿Qué est á pa sa ndo? ", consig uió decir a pesar de su traqueotomía. Una en fer mera se le acercó a la camilla. "¡Oh, estás despierto!" Escribió su nombre en una pizarra. Luego, añadió la fecha: 5 de octubre. "¿Por qué escribe 5 de octubre? ", preguntó Dan. "Me anestesiaron el 31 de agosto, así que hoy debe ser 1º de septiembre, ¿no?" "No, hoy es 5 de octubre." A t ón it o , D a n s e d io c uent a de que había estado en coma dura nte seis sema na s. Se había perdido su cumpleaños en septiembre. Se había perdido unas vacaciones de pesca en Florida. Peor aún, no podía mover ni un miembro debajo del cuello. No podía mover los dedos de los pies. No podía levantar las manos. No podía levantar la cabeza. Y había perdido 18 kilos. " Me dijeron que tenía que hacer rehabilitación", recuerda Dan. "Tenía que aprender a sentarme en la cama. Tenía que aprender a comer de nuevo. T uve que aprender a c a m i n a r de nuevo. Los fisioterapeutas intentaron sentarme, pero estaba tan débil que me caía sobre la cama." "Fue un proceso largo y lento, pero el Señor me enseñó a concentrarme en los á rboles que había fuera de la ventana mientras luchaba por levantar la cabeza. Finalmente, me ayudaron a ponerme de pie y a dar algunos pasos con el a ndador. El 1º de noviembre de 2021 me dieron el a lta . Va ler ie y yo necesit ába mos mucha ay uda . Ten í a mos en fer mera s que ven í a n cuatro horas por la mañana y cuatro horas por la tarde." los CDC en la que se decía que 20 día s después de ser dia g nosticado con COVID, la enfermedad ya no era transmisible. "¡Listo!", dijo David. I m p r i m i e r o n l a d e c l a r a c i ó n y presentaron la carta a los funcionarios del hospital. "Han pasado más de 21 días desde el diagnóstico de mi padre", les dijo David "¡Quiero verlo, ya mismo!" Aunque Valerie seguía con oxígeno y ut i l i za ndo u n a nda dor, t a mbién visitó a Dan en la unidad de cuidados intensivos. Los órganos se apagan A l cabo de dos semanas, hubo que r e t i r a r e l t ub o endot r a que a l que los méd icos había n i nser t a do, y a Dan se le practicó una traqueotomía pa ra uti liza rla a la rgo pla zo con el respirador. En medio de una de la s t a nt a s no che s , Dav id re cibió u n a llamada del hospital: "Será mejor que vuelvas. Los riñones de tu padre han dejado de f unciona r. P uede que no sobreviva la noche." Pa r a m a nt e n e rlo c on v i d a , lo s m é d i c o s p u s i e r on a D a n e n u n a m á qu i n a de d i á l i si s . Su s r i ñone s respondieron y empezaron a funcionar de nuevo. Unos d ía s má s t a rde, Dav id f ue llamado de nuevo a la cabecera de su padre. "Su hígado se está apa ga ndo. No creemos que pase la noche", le dijeron los médicos. D a n r e cibió t r e s t r a n s f u s ione s de sangre que reforzaron su función hepática. E n u n c o m a i n d u c i d o p o r medicamentos, Dan no tenía ni idea de lo que estaba pasando. Sin embargo, tuvo una conversación con Dios. Señor, ¿por qué está tardando tanto? Ya no aguanto más. Me voy. N o , n o v a s a n i n g u n a p a r t e . Imágenes de Valerie, Mindy y David se desplazaron por la mente de Dan. Has experimentado milagros cada año de tu vida. Déjame mostrártelos… Un clip de milagros rodó como una película en la mente de Dan. Después de esto, quiero que escribas un libro sobre estos milagros. Cuando Dan se acercaba a las seis semanas con el respirador, los médicos le ex plica ron a la fa mi lia que sólo

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