LA VOZ DE VICTORIA DEL CREYENTE

Edición Mayo 2016

LA VOZ DE VICTORIA DEL CREYENTE - Revista publicada por los Ministerios Kenneth Copeland, disponible gratuitamente para personas que deseen suscribirse.

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LV V C : 1 5 entrenamiento, los cuales hasta el día de hoy la mantienen viajando por todos los Estados Unidos y por fuera del país. Cinco años más tarde, en Agosto del 2008, Maureen estaba en el gimnasio haciendo yoga cuando escuchó esa misma voz suave que le advirtió que saliera de Nueva York en el año 2001. Si no dejas de beber, salir y tratar de ser como el mundo, no crecerás. "Mientas medité en Sus palabras, sentí que Dios estaba diciéndome que ir a la iglesia no era suficiente. Él quería mi vida. Él quería que diera un paso dentro del reino". Una vez más, Maureen obedeció las órdenes. Dejó de tomar y cambió sus hábitos. A medida que experimentó el amor de Dios, Él la ascendió de nivel. "Siempre juzgué mi vida al compararla con la de mis amigos", recuerda Maureen. "Pensé que así era como Dios me juzgaba. No fue hasta que me di cuenta de que Dios no me juzgaba por mis amigos, sino por Su Palabra, que me di cuenta que estaba en un error. Escogí el día de San Valentín del 2008 para empezar una nueva relación con el Señor. Ese fue el día en el que empecé a practicar el celibato. Desarrollé un apetito tan voraz por Dios que no fue difícil para mí hacer esa clase de compromiso". Sin embargo, había algo que era difícil para Maureen—un problema que no sabía cómo resolver. Poco a poco, sin darse cuenta, había estado gastando más de lo que podía, generando una deuda en tarjetas de crédito de $20.000 en el proceso. Esclava de la deuda Un viento helado soplaba la nieve con frenesí mientras Maureen peleaba a través de la nieve derretida camino a su apartamento. Una vez adentro, sacó todas sus cuentas y las puso sobre la mesa. Calculadora, papel y lápiz en mano, se sentó a enfrentar sus deudas. Tenía que haber una solución. Mordiendo la punta del lápiz, Maureen obser vó la columna formada por los números. Horas más tarde, sintió ganas "La colaboración con KCM signi ca que formo parte de una familia de fe. Mirar "La Voz de Victoria del Creyente" se ha vuelto una obligación para mí. " de llorar. Refregándose la cara con sus manos, enfrentó los hechos. No existe una salida. Todo lo que podía pagar era el interés para impedir que su casa fi nanciera de tarjetas se desplomara. Sus ancestros habían sido esclavos, pensó Maureen. Sin embargo, el la había nacido libre y había recibido toda oportunidad para lograr el éxito. Sin embargo, se había auto esclavizado por el sistema—Bloomingdale, Macy's y Best Buy. ¿Cómo podía haber sido tan exitosa en cumplir sus metas profesionales, y fallar tan miserablemente al manejar sus fi nanzas? Se fue a dormir sintiéndose tan fría y vacía como el viento invernal. Maureen continúo actuando, bailando y cantando. Formó parte del jurado en competencias de danza y entrenó las voces de muchos estudiantes en los Estados

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