LA VOZ DE VICTORIA DEL CREYENTE

Edición Diciembre 2016

LA VOZ DE VICTORIA DEL CREYENTE - Revista publicada por los Ministerios Kenneth Copeland, disponible gratuitamente para personas que deseen suscribirse.

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Este pastor compartió que había visto un DVD de un ministro invitado. "No podía dejar de llorar", le dijo. ¿Me lo prestas?, Jeremy le preguntó. ¿Ahora mismo? Esa noche, y nuevamente a la mañana siguiente, Jeremy miró el DVD y tomó notas. Nada. Después descubrió que no había dejado que el DVD terminara hasta el final del mensaje. El hombre dijo: "Si no tienes una relación personal e íntima con Jesús…" Con esas palabras, Jeremy saltó y levantó sus manos. El poder de Dios lo impactó con tal fuerza que cayó en el piso y lloró por horas. "Sentí como si el amor hubiera entrado a la habitación", Jeremy recuerda. "Este amor, literalmente cambió mi vida". "Siempre había amado a Renée, pero jamás como después de esa experiencia. Después de ese momento durante muchos años, todo lo que podía hacer era pensar en Jesús y llorar". Con casi ocho años de búsqueda, Jeremy y Renée todavía no tenían hijos y vivían en una casa demasiado silenciosa para ser cómoda. Durante el otoño de 2008, dos hombres se acercaron a Jeremy y tres mujeres a Renée. Cada uno de ellos tenía una palabra, una visión o un sueño, pero el mensaje de todos era el mismo. Pronto tendrán un bebé. La iglesia estaba de fiesta, decorada con luces doradas que hacían contraste con ramas verdes, cuando Jeremy y Renée llegaron al servicio justo antes de la Navidad. El pastor enseñó acerca de la respuesta de M a r í a a l á n g e l Gabriel. El nombre llamó la atención de Renée. Durante va r ios a ños, el la y Jeremy había n recibido un nombre: Gabriel. ¿Vamos a tener un hijo? "Préstale atención a cómo respondió María", exhortó el pastor . Ella dijo: «¡Cúmplase en mí lo que has dicho!». E l S e ñ o r l e resaltó esas palabras a Renée, haciendo que sintiera la urgencia de hacer que esta fuera su declaración de fe. "Empecé a confesar esas palabras", recuerda Renée. «¡Cúmplase en mí lo que has dicho!». Una palabra de parte de Dios Al fines del 2008, durante el servicio de Año Nuevo, Kenneth Copeland dio una palabra profética para el siguiente año: Cosas que pensaste que absolutamente nunca, nunca sucederán van a suceder tan fácilmente y sin esfuerzo, que dirás: "no sé por qué alguna vez estuve tan preocupado por eso…" Así será el 2009, ¡será el año más maravilloso que alguna vez hayas tenido en tu vida! Instantáneamente, Renée y Jeremy supieron que esa palabra profética era para ellos. Tres semanas más tarde, Renée y Jeremy tenían síntomas de gripe que no se quitaban. Se sentían tan mal, que Renée salió de trabajar ese día al medio día. Sentía que quería meterse en la cama. Sin embargo, sin razón aparente, se hizo una prueba de embarazo. ¡Positiva! Ella miraba fijamente el resultado, y parpadeó. ¿Podría ser cierto? "Jeremy", le dijo más tarde a su esposo. "Creo que sé por qué estoy tan enferma". "De verdad, ¿por qué?". "¡Creo que estoy embarazada!". Tanto el doctor de la familia como el obstetra de Renée le confirmaron que sus síntomas no eran gripales. "Parece que quedaste embarazada el 31 de diciembre", le dijo su obstetra. Renée y Jeremy no podían dejar de reírse con gozo. Nunca habían estado tan felices. Sin embargo, cinco semanas más tarde, ella empezó a tener cólicos y a manchar. La mañana siguiente, ella y Jeremy se sentaron en la mesa de la cocina en silencio. El ambiente se sentía pesado. La voz del Señor irrumpió el silencio. Yo no doy regalos rotos. "Esa palabra de Dios cambió todo", Renée recuerda. "Desde ese momento, cuando aparecían problemas, no les prestábamos atención". El 14 de septiembre de 2009, nueve años después de tratar de comenzar una familia, Renée dio a luz a Jemma Grace. Ella nació un mes antes del cumpleaños número 40 de Renée. "Estábamos perfectamente contentos con un hijo", Jeremy explica. "Sin embargo, cuando Jemma tenía dos años, Renée me despertó una mañana y me mostró una prueba de embarazo positiva. Cohen Gabriel nació el 27 de octubre de 2011 y pesó 4.100 gramos. En la actualidad, Jeremy trabaja en la Iglesia Gateway en Southlake, Texas, y Renée todavía trabaja en KCM. Jemma tiene 7 años y Cohen 5. Los niños son inseparables. "Si no nos hubiéramos convertido en colaboradores de KCM y aprendido a vivir por fe, hoy en día no tendríamos esos niños", comenta Jeremy. "No es un accidente que Renée quedara embarazada de Jemma la noche de Año Nuevo en el año 2008. Nosotros éramos colaboradores de pacto con el profeta que liberó esa palabra; al mismo tiempo, Renée había estado declarando: «¡Cúmplase en mí lo que has dicho!». Esa palabra poderosa trajo a un hijo. "Mirando a l pasado, nos damos cuenta de que Dios sabía la pelea de fe que tendríamos que soportar para traer estos niños al mundo. Por esa razón nos hizo sembrar nuestra mejor semilla— todo lo que teníamos—en un orfanato chino. Nosotros no sabíamos que estamos sembrando en nuestra propia familia; sin embargo, Dios lo sabía y Él nos bendijo con hijos propios". 1 8 : LV V C

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