LA VOZ DE VICTORIA DEL CREYENTE

Edición Enero 2017

LA VOZ DE VICTORIA DEL CREYENTE - Revista publicada por los Ministerios Kenneth Copeland, disponible gratuitamente para personas que deseen suscribirse.

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través de ti: «porque Dios ama a quien da con alegría. Y Dios es poderoso como para que abunde en ustedes toda gracia, para que siempre y en toda circunstancia tengan todo lo necesario, y abunde en ustedes toda buena obra» (2 Corintios 9:7-8). "¿Pero, her ma no Copela nd, qué sucede si la economía cae en una depresión?". B u e n o , ¿ y q u é s i l o h a c e ? Mientras continúes caminando en LA BENDICIÓN, puedes todav ía siempre tener de más, especialmente e n mome nto s d i f íc i l e s p a r a q u e podamos ser de BENDICIÓN a todos los que estén en necesidad. M i s p a d r e s l o d e m o s t r a r o n d u r a nt e l o s a ñ o s 19 3 0 y 19 4 0 . E l l o s p r o s p e r a r o n a u n d u r a n t e la Gra n Depresión y la S eg u nda Guerra Mundial. Ellos no tenían la revelación que nosotros tenemos en la actualidad acerca de caminar en LA BENDICIÓN, pero creían en Dios, diezmaban y ofrendaban desde el día en que se casaron. Mi papá tenía dos cuentas bancarias. Una era su cuenta del diezmo, la cual le pertenecía a Dios, y la otra era su cuenta personal, y se aseguraba de no mezclarlas. Como resultado, mientras mucha gente en este país se agolpaba en las f ilas de desempleo, mi papá nunca estuvo sin trabajo por más de 24 horas. Si perdía uno, siempre encontraba uno mejor, y muy rápido. Recuerdo cuando me contó acerca de una ocasión en particular en la que descubrió al final del día que lo habían despedido. Él y mi mamá oraron a l respecto esa misma noche, y a la mañana siguiente, muy temprano sintió que debía ir a la fábrica de algodón. Cuando el dueño llegó, le preguntó a mi papá porqué estaba allí. "He venido temprano porque me necesitas", le respondió mi papá. "¿Puedes llevar la contabilidad?", le preguntó el dueño. "Sí", le respondió. M i p a p á j a m á s h a b í a h e c h o contabilidad en toda su v ida, pero e r a b u e n o c o n l a s m a t e m á t i c a s y pensó: si puedo ve r los lib ros de e s t a c o m p a ñ í a , p o d ré e n t e n d e r e l si stem a y continu a r ha cié ndolo . É l tenía razón. Le g ustó el trabajo y terminó inscribiéndose en un curso de contabi l idad en la Universidad de Negocios de Draughon. Cuando terminó el curso, la misma universidad l o c ont r ató p a r a e n s e ñ a r. E l l o s continuaron promoviéndolo y el siguió prosperando. ¿Por qué? Porque LA BENDICIÓN del SEÑOR es la que enriquece. Ev ent u a l mente , l a u n i v e r sid a d le ofreció un trabajo en ventas. No esperaban que lo aceptara porque era a comisión, pero él dijo: "¡Sí! ¡Ese es el trabajo que quiero!" El trabajo requería que v iajara, y debido a la guerra, las llantas y la gasolina eran difíciles de encontrar; sin embargo, él siempre tuvo lo que necesitaba. Debido a que LA BENDICIÓN obraba en su vida, mi papá vio las posibilidades que otras personas no vieron. Por ejemplo, un día durante l a g u e r r a , e s t a b a e n u n p u e bl o pequeño por negocios y v io a un hombre vendiendo una horma muy grande de queso. Debido a que el queso escaseaba en ese momento, era costoso; sin embargo, mi papá compró la horma completa. Lo llevó a su auto, lo cortó en pedazos y se lo vendió a los dueños de los negocios en la plaza, haciendo una ganancia de 3 o 4 veces lo que había pagado. Lo sé porque yo estaba con él ese día. ¿Qué era lo que sucedía? Él siempre tenía en abundancia. Siempre tenía lo suficiente para toda obra buena. Así fue todo el tiempo mientras yo crecía. Mi papá y mi mamá siempre estaban dando y ayudando a alguien. Cada evangelista que venía al pueblo se quedaba en nuestra casa. Aun en los tiempos más difíciles, mi mamá les preparaba pollo frito. Comían tanto que yo solía pensar que nos iban a deja r sin nada. Sin emba rgo, eso nunca sucedía. N u n c a h u b o h a m b r u n a e n l a casa de los Copeland. Y nunca la habrá, porque todavía continuamos caminando en LA BENDICIÓN de Dios. Lo mismo puede hacerse realidad en t u v id a . Si n i mp or t a r c u á le s sean las condiciones a tu alrededor, p u e d e s c o n t i n u a r c r e y e n d o e n L a PA L A B R A , o f r e n d a n d o y prosperando. ¡Puedes tener todo lo suficiente en todas las cosas y ser una BENDICIÓN en medio de un mundo que desesperadamente necesita que seas BENDECIDO! es.kcm.org/CONTACTO

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