LA VOZ DE VICTORIA DEL CREYENTE

Edición Febrero 2017

LA VOZ DE VICTORIA DEL CREYENTE - Revista publicada por los Ministerios Kenneth Copeland, disponible gratuitamente para personas que deseen suscribirse.

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LV V C : 1 5 consumo de carbohidratos, sufrimos de las enfermedades crónicas asociadas como resultado directo. Sí, algunas grasas son malas, pero no todas. He escuchado a cristianos decir: "¿No dijo Jesús: 'Danos el pan de cada día'? Deberíamos comer pan todos los días, ¿verdad?" Esa es una lógica defectuosa en muchos niveles, pero incluso si fuera cierta, el pan de hace 2000 años no era lo mismo que el pan de hoy. Nuestro pan es híbrido, mestizo, refinado, y carece de fibra y muchos nutrientes. Es casi como comparar un chocolate M&M de color naranja con una naranja. ¡No son lo mismo, en lo absoluto! La historia lo demuestra Este programa cetónico funciona bien, espec ia l mente en la s personas con exceso de grasa en el vientre. La dieta baja en carbohidratos, o cetónica, es increíblemente e f e c t i v a y h a s i d o practicada y prescrita por más de 150 años. A mediados de 1800, un empresa rio inglés llamado William Banting estaba tratando en vano de perder peso; por el contrario, continuaba aumentando. Los doctores de ese siglo le dijeron lo que la mayoría de los doctores de hoy en día les dicen a sus pacientes: restringe las calorías y haz ejercicio. Eso no funcionó pa ra Ba nt i ng, qu ien también ex per imentó con laxantes, diuréticos, baños turcos y las dietas de hambre, entre sus 20 intentos fallidos para bajar de peso. Banting, que era bajito y pesaba más de 90 kg (200 libras), sufría de una hernia umbilical dolorosa que constantemente requería de vendaje, y sus rodillas le dolían tanto que se las envolvía para aliviarlas. Subir las escaleras lo dejaba sin aliento y transpirando muchísimo. No hace falta decir que Banting estaba desesperado por respuestas. Un día hizo una cita con el Dr. William Harvey por un problema auditivo. El Dr. Harvey había estudiado en París y le recomendó una nueva dieta que incluía carne, pescado y aves de corral, junto a una ilimitada cantidad de grasa animal y lácteos. También incluía pequeñas cantidades de fruta que fueran bajas en azúcar, y sólo unos pocos mordiscos de tostada. No estaban permitidos los endulzantes, los dulces ni las harinas. Como resu ltado, Ba nt ing perd ió aproximadamente 23 kg (50 libras) en casi un año, sin sufrir efectos colaterales como los que había tenido en sus dietas previas. Además, esta dieta le proporcionó mayor energía, redujo su dolor de rodillas y nunca más se quedó sin aire ni sudó en exceso después de subir las escaleras. Banting estaba tan emocionado con su pérdida de peso que escribió un pequeño libro al respecto, con su historia y la dieta que cambió su vida. La demanda del libro era tan grande que fue traducido a varios idiomas. Banting mismo se hizo muy popular. De hecho, la frase "¿Estás haciendo Bant?" era otra manera de preguntar: "¿Estás haciendo dieta?" Esta frase era sinónimo de hacer dieta. Cuando las personas pensaban en hacer dieta, pensaban en Banting. La medicina moderna está de acuerdo La dieta cetónica, alta en grasas y baja en carbohidratos fue redescubierta alrededor de 1920 para tratar convulsiones en niños y adultos, y se usó hasta comienzos de 1940 cuando se desarrollaron medicinas para la epilepsia. Al comienzo de 1960, el Dr. Robert Atkins inauguró su práctica en la ciudad de Nueva York. A pesar de que sólo tenía 33 años, parecía como de 45. Tenía tres barbillas y pesaba más de 90 kg (200 libras). Estaba tan agotado que no se levantaba antes de las 9 de la mañana y nunca veía a los pacientes antes de las 10 de la mañana. Frustrado, Atkins se encontró con la dieta baja en carbohidratos por el Dr. Alfred W. Pennington, y perder peso fue fácil. Eventualmente, Atkins fue contratado por una compañía para ayudar a sus empleados. Fue muy exitoso, ayudando a 64 de 65 empleados a perder peso hasta alcanzar el peso normal. Con el correr de los años, Atkins redefinió su dieta para que fuera una dieta baja en carbohidratos, alta en proteína, y alta en grasa. A medida que su reputación se hizo conocida, su dieta eventualmente terminó en la revista Vogue y era llamada "la dieta Vogue". En 1972, publicó su libro Dr. Atkins' Diet Revolution, (La Revolución dietética del Dr. Atkins), el cual vendió diez millones de copias y se convirtió en el libro de dieta más vendido de todos los tiempos. A pesar del (y debido al) éxito de su dieta, Atkins era percibido como polémico y fue calificado como un "curandero" por muchos de sus colegas médicos. En la década de 1990 y a principios de 2000, me reunía y hablaba con el Dr. Atkins casi cada año en conferencias médicas. Él y yo conversábamos de la salud y dietas, y yo lo llenaba de preguntas sobre los más recientes avances en la medicina nutricional. En el 2003, el Dr. Atkins se resbaló y cayó sobre una acera helada, fracturándose el cráneo. Murió 9 años más tarde. Hubo rumores de que murió de un ataque al corazón y que era un obeso mórbido al momento de su muerte. Pero esos rumores eran completamente falsos. La verdad es que Atkins tenía un peso promedio al momento de su muerte. ¿Por qué funciona la dieta cetónica? En más de 30 años practicando medicina, he analizado cada dieta que existe. He medido, contado, calculado y examinado a nivel celular para ver qué funciona y qué no funciona para perder peso. He monitoreado, aconsejado y trabajado directamente con miles de pacientes para ayudarlos a ser saludables y mantenerse en esa condición. En la dieta cetónica, no estamos repitiendo la dieta AQUELLOS QUE RECIBEN ENTRE EL 45 Y EL 65 POR CIENTO DE SU INGESTA CALÓRICA VÍA CARBOHIDRATOS SÓLO ENGORDARÁN MÁS Y MÁS.

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