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SCORE Journal Issue - SEPTEMBER 2017_Spanish

SCORE Journal - The Official Publication of SCORE Off-Road Racing

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En Un Ala Y Un Rezo AUNQUE NUNCA VIO UNA VICTORIA, EL CHALLENGER IV DE MICKEY THOMPSON FUE UNO DE LOS VEHÍCULOS MÁS INFLUYENTES QUE CAMBIARON EL AUTOMOVILISMO TODOTERRENO POR DAN SANCHEZ FOTOGRAFÍA DE ICON MEDIA La gente que conocía a Mickey Thompson lo describió como un innovador; un rasgo que finalmente llevó a la creación de SCORE Internacional y de las carreras todoterreno como las conocemos hoy día. Un corredor de corazón, Thompson participó en muchos de sus propios eventos de carreras todoterreno y al hacerlo, finalmente se sintió frustrado por la falta de capacidad que tenían en el momento los vehículos todoterreno. A mediados de la década de 1970, los corredores de Baja utilizaban chasis ligeros con motores VW, por lo que Thompson decidió diseñar su propio vehículo que realmente cambiaría la forma en que los corredores y diseñadores de vehículos construirían los vehículos ilimitados de hoy. El vehículo comenzó cuando Thompson compró un par de chasis buggy que fueron construidos originalmente por Smokey Allerman para Larry Minor. Thompson tenía a su entonces jefe de equipo John House, junto con Bruce Paris y su hijo Danny Thompson trabajando en el coche, y en 1977 el Challenger IV nació. El Challenger IV debutó en el Mexicali 250 de 1978 y fue notablemente muy diferente del resto de la competencia. Mientras que cada uno de los otros buggy de la Clase 1 estaban equipados con VW y tenían 10 pulgadas de recorrido de suspensión, el Challenger IV tenía un Chevrolet V8 de 700 caballos de fuerza, 18 pulgadas de recorrido trasero y 15 pulgadas de recorrido en la parte delantera. Esencialmente, era un coche de sprint hecho para funcionar en Baja. El vehículo fue más reconocido por su ala grande que le ofreció estabilidad a altas velocidades que, de acuerdo con su hijo Danny Thompson, ayudó a estabilizar el coche, ya que podría acelerar muy rápidamente. Para lograr las capacidades diseñadas en el Challenger IV, nuevos amortiguadores tuvieron que ser construidos. “Recuerdo que mi papá construyó tantos prototipos de amortiguadores que llenaron toda la habitación de la tienda”, dijo Danny Thompson. “Mi papá hizo que los ingenieros trabajaran largas horas tratando de construir algo que ofreciera más recorrido en la rueda y no se rompiera”. El resultado del esfuerzo fue utilizar amortiguadores de 41 pulgadas de largo con aletas de enfriamiento que se usaron con un espiral doble sobre el vehículo. De 1978 a 1980, el Challenger IV lideró muchas carreras off-road, incluyendo la SCORE Baja 500 y Baja 1000, pero debido a su velocidad, el vehículo a menudo se rompió y terminó publicando DNF (retiros de una carrera). Thompson finalmente retiró el Challenger IV y construyó el Challenger V utilizando tecnologías más avanzadas disponibles en ese momento. El vehículo permaneció durante varios años hasta la muerte de Thompson y su esposa Trudy en 1988. El Challenger IV fue llevado a la casa de su hija Lyndy Thompson en Eugene, Oregón, donde permaneció durante más de una década hasta que fue adquirido por Rory Ward en 2011, y comenzó un proceso de restauración. “Se necesitaron tres largos años para que la restauración se completara en este vehículo”, dijo Ward. “Finalmente conseguimos que estuviese listo para competir y lo hicimos en el NORRA Mexican 1000 del 2014. Al verdadero estilo de Mickey Thompson, el Challenger IV luchó por el liderato, pero tuvo que retirarse con problemas de sobrecalentamiento después de 600 millas en la carrera”. El Challenger IV se parece mucho a como era en la década de 1970. El motor original, sin embargo, había desaparecido hacía mucho tiempo, así que Ward instaló un Chevy 383 que utiliza un carburador Holley de cuatro cilindros con un gran filtro de aire K&N en la parte superior. Los pistones REF Unlimited alimentan a las tuberías laterales que corren a lo largo del vehículo, mientras que las poleas modernas mecanizadas CNC de Kroyer hacen funcionar el alternador y la bomba hidráulica de dirección Howe. Las mangueras Earl’s Performance reemplazaron una gran parte de la tubería del vehículo, mientras que un sistema de encendido ACCEL activa al vehículo cuando ruge a la vida. La transmisión es una Gearworks de dos velocidades Powerglide que utiliza un escudo de dispersión de seguridad de titanio que está conectada a la palanca de cambios original montada a la derecha del tablero. La transmisión de dos velocidades alimenta una Dana 60 de magnesio que fue construida por Sandy Cone. Para mantener el motor fresco, un radiador de carreras C&R se ubica en la trompa del vehículo, pero ventiladores eléctricos también fueron instalados dentro de la cabina para sacar el aire caliente del motor y ayuda a mantener fresco al conductor. Mientras que el chasis es original, así como el ala original hecha por Larry Stork y Scott Neth, el cuerpo necesitaba ser restaurado. Nye Frank reprodujo los paneles de carrocería de aluminio antes de que fueran revestidos de color amarillo por Allcoat. Inutilizado por más de una década, el sistema eléctrico del vehículo estaba inservible, por lo que Ward solicitó a TRH Wired recablear todo el vehículo, lo que incluye el uso de sus cuatro luces originales Cibie Oscars montadas en la delantera. Aparte de la parte más notable del vehículo, el ala de dos etapas, la suspensión del Challenger IV y los amortiguadores traseros de 41 pulgadas son lo que también se nota primero. Debido a que los originales eran diseños de Thompson, Ward tuvo que trabajar con King Shocks para crear piezas que encajaran y funcionaran con la suspensión original de la barra de torsión del automóvil. La empresa presentó una versión de su Coilover 3.0 para la parte trasera, y amortiguadores 2.5 con depósito para el frente. Las barras de torsión fueron reemplazadas por unidades Sway-a-Way y la suspensión mantuvo su aspecto original utilizando componentes modernos. Ward utilizó un conjunto de ruedas Centerline, 15x7.5 en las delanteras y 15x9 atrás con guarda polvos Halibrand. A las ruedas se les montaron un conjunto de neumáticos (33x14.50x15) Mickey Thompson Baja Belted en la parte delantera, y neumáticos (36x13.50x15) Mickey Thompson Baja Kings en la parte trasera. Las cuatro ruedas utilizan los modernos calipers y discos de freno Wilwood para ayudar a detener el vehículo. El único asiento de conductor se reprodujo lo más parecido posible al original por Mastercraft que también agregó sus arneses de seguridad. Si das una mirada al volante de acero verás que Mickey Thompson quería reducir el peso en cualquier lugar que fuese posible. El tablero es simple pero tiene una variedad de interruptores de la vieja escuela con un tacómetro Auto Meter ProComp montado en el centro. “Es un infierno montarlo”, dijo Ward sobre manejar el Challenger IV. “Sin embargo, no habría sido posible reconstruirlo sin la ayuda de muchas personas, como Curt Leduc, Collins Motorsports, Pete Corwin, Bear Race Cars, SBP Motorsports, Mickey Thompson Tires y Lyndy Thompson”. Aunque el Mickey Thompson Challenger IV está ahora retirado de cualquier tipo de carreras, el vehículo sigue siendo fascinante para mirar y admirar. No hay demasiados pilotos que puedan sentarse al volante de un vehículo como este por 1000 millas y no salir con algunos moretones. Sin embargo, el Challenger IV ofrece una mirada dentro de la mente de una de las mentes más influyentes del automovilismo y permite reflexionar sobre lo que costó llevar al automovilismo todoterreno a donde está hoy. Agradecimientos especiales: Collins Motorsports, Pete Corwin, autos de carreras Bear, Curt Leduc, SBP Motorsports, MT Tyres y Lyndy Thompson Captions AUNQUE NUNCA VIO UNA VICTORIA, EL CHALLENGER IV DE MICKEY THOMPSON FUE UNO DE LOS VEHÍCULOS MÁS INFLUYENTES QUE CAMBIARON EL AUTOMOVILISMO TODOTERRENO 1. DURANTE LA COMPETENCIA, ÉSTA ERA LA ÚNICA VISION QUE TUVIERON LOS OTROS CORREDORES DEL CARRO HASTA QUE THOMPSON LO MANEJÓ MUY FUERTE LO AVERIÓ. 2. LOS AMORTIGUADORES ORIGINALES MICKEY THOMPSON YA NO ESTABAN, POR LO QUE RORY WARD LE ENCARGÓ KING SHOCKS FABRICAR REEMPLAZOS PARA LA RESTAURACIÓN EQUIPADO ORIGINALMENTE CON UN CHEVY V8 DE 700 HP, WARD LO EQUIPÓ CON UN PEQUEÑO MOTOR 383 CID CON PISTONES REF Y ESCAPE LATERAL EL AUTO AÚN SUFRE DE SOBRECALENTAMIENTO OCASIONAL, A PESAR DE LA GRAN ABERTURA EN LA TROMPA PARA AYUDAR A REFRIGERAR EL MOTOR Y LA DIRECCIÓN LA SUSPENSIÓN DELANTERA UTILIZA AMORTIGUADORES DUALES KING 2.5 MIENTRAS QUE LA TRASERA ES UNA COMBINACIÓN DE AMORTIGUADORES KING 3.0 CON COILOVER Y ESPIRALES DE TORSIÓN ORIGINALES EL EJE TRASERO MAGNESIUM ES PARTE DE UNA TRANSMISIÓN QUE UTILIZA UN POWERGLIDE DE DOS VELOCIDADES EL ASIENTO TIENE SU PROPIA SUSPENSIÓN, Y EL TABLERO MUESTRA LA SIMPLICIDAD DE LOS COMPONENTES EN ESE TIEMPO

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