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SCORE Journal - The Official Publication of SCORE Off-Road Racing

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El Big Oly de Parnelli Jones Un piloto y vehículo legendarios que tienen profundas raíces en la historia de las carreras en BaJa Por Dan Sánchez Fue una gran sensación cuando el legendario vehículo de carreras todoterreno llamado Big Oly, pasó por el bloque de subasta Mecum y se vendió por un total de $1.87 millones. Parnelli Jones y su hijo PJ estaban mirando con ansias, al igual que millones de fanáticos de las carreras todoterreno que han seguido las carreras de Baja durante décadas. El Big Oly tiene una rica historia, que comenzó con el ganador de la Indy 500, Parnelli Jones, y el constructor de autos de carrera Ford y propietario de equipo Bill Stroppe. En ese momento, las carreras todoterreno eran un territorio nuevo y Jones, al principio, dudaba sobre competir en algunos de los eventos de la Baja 1000 de los que tanto había oído hablar. “Bill Stroppe ya estaba involucrado en las carreras todoterreno”, dice Jones. “Gané el campeonato de autos stock en la USAC con Stroppe en un Mercury. Estábamos en una fiesta y me pidió que fuera a hacer la Baja 1000. Le dije que no creía que fuera capaz de hacerla. Stroppe me dijo que probablemente yo no era lo suficientemente hombre para manejarla de todos modos. ¡Eso fue como lanzar una bandera roja a un toro, le dije que preparara esa chatarra!”. Jones se refería a los Ford Broncos que Stroppe había construido para afrontar la carrera de la Baja 1000 en 1967, a los que luego le arrancaría la parte delantera durante una carrera después de empujarlos con mucha fuerza en el recorrido. Con Jones ya “enganchado” a las carreras de Baja, quería una Bronco de tracción en dos ruedas para competir. Stroppe construyó un prototipo con una suspensión de doble viga en I, pero Ford pasó del diseño. Jones tomó el prototipo y lo corrió en la Baja 500 de 1970 y la ganó. “Después de eso, quería que Stroppe me construyera un vehículo especializado que se convirtió en el ‘Big Oly’. Quería ganar y vencer a las motocicletas”, dijo Jones. Según Jones, Stroppe no quería construir un vehículo personalizado, por lo que le pidió a Dick Russell, uno de los fabricantes de Stroppe en ese momento, que le construyera el vehículo. “Empezamos a hacer algunos dibujos y él empezó a construirlo en casa”, dijo Jones. “Incorporó las ideas que se me ocurrieron. En las 500 Millas de Indianápolis, le mencioné lo del camión personalizado a Mickey Thompson y Stroppe se enteró. Se enojó y finalmente dijo que lo trajeran al taller y terminaron el vehículo”. La Bronco, conocida hoy como Big Oly, es un vehículo con chasis de tubo con partes de la carrocería Bronco hechas de fibra de vidrio. “Pusimos brazos de tracción en la parte delantera y agregamos un cuerpo de fibra de vidrio. También tenía que tener una tapa, así que pensé que podríamos ponerle un ala. Es lo que terminó por darle a la camioneta su personalidad”, dijo Jones. “También tenía luces que salían del ala”. La Bronco fue uno de los vehículos más innovadores de su época, lo que la convirtió en uno de los vehículos legendarios de Baja y las carreras todoterreno. “En uno de nuestros autos Indy, teníamos una cortina en la parte delantera del parabrisas. Dirigiría el flujo de aire hacia arriba y sobre la cabeza”, dijo Jones. “Lo pusimos en la Bronco y funcionó un poco. Le hicimos muchas cosas innovadoras. Fue tan dominante. La corrimos en la Baja 1000 (1970). Deberíamos haber ganado esa carrera sin dudarlo, pero la volqué de cabeza”. Jones ganó la Baja 500 de 1970, la Baja 1000 de 1971 y 1972 y la Baja 500 de 1973 en el Big Oly. Mucho de eso lo atribuye a Bill Stroppe, quien le recordaba que redujera la velocidad para que el vehículo durara toda la carrera. “Stroppe siempre me golpeaba para reducir la velocidad”, dijo Jones. “Fue una de las razones por las que construimos el Big Oly de manera bastante resistente, simplemente porque yo corría demasiado duro. Nunca he sido un corredor muy inteligente. Sé ir rápido. Simplemente no sabía cómo ir lo suficientemente rápido. Para mí, correr en Baja terminó siendo algo más personal y nunca lo olvidaré. Se ha convertido en un evento importante y tanto la Baja 500 como la Baja 1000 han jugado un papel importante en mi carrera. ¡Mi única queja es que desearía haber ganado más carreras!”. SJ

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