LA VOZ DE VICTORIA DEL CREYENTE

Edición Octubre LATAM 2021

LA VOZ DE VICTORIA DEL CREYENTE - Revista publicada por los Ministerios Kenneth Copeland, disponible gratuitamente para personas que deseen suscribirse.

Issue link: http://read.uberflip.com/i/1414352

Contents of this Issue

Navigation

Page 5 of 15

ellos e n S u p l e n i t u d y poder; Aquél que Jesús prometió que vendría. Si has leído Hechos 2, ya estás familiarizado con el resto de la historia: «Cuando llegó el día de Pent ecos t és, t odos el los es t a ba n juntos y en el mismo lugar. De repente, un estruendo como de un fuerte viento v ino del cielo, y sopló y l lenó toda la casa donde se encontraba n. Entonces a pa r e cier on u n a s len g u a s c omo de f uego, que se repa r tieron y f ueron a posarse sobre cada uno de ellos. Todos ellos fueron llenos del Espíritu Santo, y c o m e n z a r o n a h a b l a r e n o t r a s lenguas, según el Espíritu los llevaba a expresarse.» ¡ A e s o l e l l a m o u n e v e n t o ex traordina rio! Dios no había podido tocar físicamente a Su pueblo durante 4 . 0 0 0 a ñ o s . H a s t a e s e i n s t a n t e , había evitado todo el tiempo ta n solo acerca rse a el los porque Su absoluta pureza y santidad, al entrar en contacto con su pecado, los habría destruido. Pero a hora tenía una nueva raza de p er s on a s . H a bí a n n a cido de nue vo. Había n sido hechos nueva s criatura s e n C r i s t o Je s ú s . A s í q u e , c u a n d o f i n a l m e n t e t u v o l a p o s i bi l i d a d d e abrazarlos en plena seguridad, Dios se apresuró a entrar en la habitación donde lo estaban esperando y se POSÓ SOBRE ellos. Los envolvió con el fuego de Su presencia y, en luga r de dest r u i rlos, fueron llenos del Espíritu Todopoderoso de Poder hasta rebosar. Eso mismo fue lo que experimentaste s i h a s r e c i bi d o e l B a u t i s m o e n e l Espíritu Santo. Es posible que no hayas e s c uch a do u n v ient o i mp et uoso, n i visto lenguas de fuego; sin embargo, el Espíritu Santo vino sobre ti y te llenó ha sta rebosa r. Fuiste bautizado en el mismo Espíritu de Poder que se derramó en Hechos 2 y se te abrió la puer ta de entrada a lo sobrenatural. Personas de adentro hacia afuera " Pero her ma no Copela nd , soy t a n indigno." ¡ No lo er e s! D io s no cr e ó nue v a s criaturas indig nas. Él dijo, cua ndo te conver tiste en una nueva creación en Cristo: «de modo que si alguno está en Cristo, ya es una nueva creación; atrás ha quedado lo viejo: ¡a hora ya todo es recibir porque n o l o v e , n i lo conoce; pero u s t e d e s l o conocen, porque p er m a n e c e c on ustedes, y esta rá en ustedes… El que tiene mis mandamientos, y los obedece, ése es el que me ama; y el que me ama, será amado por mi Padre, y yo lo amaré, y me manifestaré a él.» (versículos 16-17, 21). ¿Alguna vez te has preguntado cómo se te manifestará Jesús ahora que ya no está en la Tierra? ¡ A t r a v é s de l E s pí r it u de Po der! A sí lo ha rá . ¡Por el Espíritu Sa nto, el Consolador que te ha enviado para que viva en ti, contigo para siempre! E l E s p í r i t u S a n t o e s Q u i é n t e manifiesta a Jesús: en ti y a través de ti. Vives en Jesús, y Él en ti, ¡y Él hace las obras! " Pero herma no Copela nd, no estoy seguro que haya sido llamado a hacer las obras de Jesús", podrías decir. "No soy un ministro de tiempo completo como Él o como Usted. Solo soy un creyente común y corriente." ¡No existe tal cosa como un creyente "ordi na r io"! Como creyente, eres u n milagro viviente de Dios. En tu interior mora el mismo Espíritu de Poder que t en í a Jesú s . Ha s recibido el m i smo Espíritu que recibieron los primeros discípulos. Después de la resurrección, Jesucristo «sopló y les dijo: «Reciban el Espíritu Santo»» (Juan 20:22). E n e s e m o m e n t o , l o s d i s c íp u l o s nacieron de nuevo. De la misma manera que tú recibes a Jesús como tu SEÑOR, ellos sufrieron un ca mbio mi la g roso. Sus espíritus fueron recreados por el Espíritu Santo, Él vino a vivir en ellos e inmediatamente comenzaron a producir Su fruto. Pasaron de estar deprimidos a estar llenos de gozo. De esta r encerrados a causa del temor, sin saber qué hacer, a marchar valientemente hacia Jerusalén para esperar la «Promesa del Padre», el derramamiento del Espíritu Santo sobre que suceda, permanece siempre estable. T a n s o l o p i e n s a e n l a c o n m o c i ó n q u e h a s u f r i d o e s t e p l a n e t a . Durante años, la gente ha hecho e xc av a cione s , mov iendo g r a nde s montones de tierra de un lugar a otro. Se han explotado montañas y detonado bombas. Piensa en todos los terremotos que ha resistido la Tierra. Sin embargo, t o d av í a s e m a nt iene en e qu i l ibr io, tra sladá ndose a través del espacio a una velocidad de 1.600 K m/ h en una d i rección y a 16 .0 0 0 K m / h en ot ra ; sencillamente continua avanzando. ¿Quién es este Espíritu de Poder? Es Aquél que se ma nifestó en cada e v e n t o s o b r e n a t u r a l d e l A n t i g u o Testamento. Es Quién milagrosamente empoderó a Abraham a los 100 años y a su esposa de 90 a pesar de su esterilidad pa ra da r a luz. Es Aquél que pa r tió el Mar Rojo, derribó los muros de Jericó, le permitió a David aniquilar a Goliat, resucitó al hijo de la viuda de Sarepta e hizo todo tipo de hazañas divinas. En el Nuevo Testa mento, es Aquél que facilitó la tota lidad de las poder- osas obras de Jesús. Incluso Jesús no tenía el poder por Sí Mismo para hacer m i la g ros, seña les y prod i g ios en Su ministerio terrenal. Se despojó de esos poderes divinos cuando se hizo carne y hueso; un ser humano. Entonces, a pesar que se trataba del Hijo de Dios desde Su nacimiento, Su ministerio sobrenatural no comenzó hasta que fue, a la edad de 30 años, bautizado en el río Jordán, y el Espíritu Santo vino sobre Él, ¡invistién- dolo con el Espíritu de Poder! Un milagro viviente de Dios El Espíritu de Poder es el Espíritu del Padre. «Yo estoy en el Padre, y … el Padre está en mí» dijo Jesús. «Las palabras que yo les hablo, no las hablo por mi propia cuenta, sino que el Padre, que vive en mí, es quien hace las obras.» (Juan 14:10). Jesús también dijo que después de Su muerte y resurrección, haríamos esas mismas obras, de la misma manera. «El que cree en mí», dijo, «hará también las obras que yo hago; y aun mayores obras hará, porque yo voy al Padre.» (versículo 1 2). P rosi g u ió: «…y él le s d a r á ot ro Consolador, para que esté con ustedes pa r a s iempr e : e s de c i r, e l E s pí r it u de verdad, a l cua l el mundo no puede 6 : LV V C SU PODER YA ESTÁ EN NOSOTROS Y SU PROVISIÓN YA ESTÁ EN NOSOTROS. ¡INCLUSO SU REINO ESTÁ EN NOSOTROS!

Articles in this issue

Archives of this issue

view archives of LA VOZ DE VICTORIA DEL CREYENTE - Edición Octubre LATAM 2021